Tú

jueves

Y ella me dijo...



Cuéntaselo a ella.

Si tanto sabe de la vida, que me explique cómo se miran las nubes y que se piensa mientras las miras, si quieres volar o no quieres morir…

¿Cómo se tranquilizan los latidos del corazón? Lo he intentado con besos y abrazos, pero no hay manera, pregúntaselo… Se como acelerarlos, pero no como calmar ese “tun-tun” que me activa los sentidos al 100%.

Muchas veces se acerca y me da consejos de cómo enfrentarme a la vida de una manera tranquila, que no pasiva, sino activa, pero siempre con paciencia, como ella se acerca, con paciencia pero siempre con fuerza…

Y siempre me repite…” Perdí una oportunidad” y siempre me digo…”No dejes que tu pierdas todas las que ella perdió, échale huevos y no pierdas ni una, que el tren no volverá a pasar y no hay dinero para tanto billete…”

Es un sueño roto, no tenía miedo de nada, y toda la fuerza del mundo, yo tengo miedo de todo y a veces me faltan las fuerzas, y me repito cada mañana al posar los pies en la tierra “hay que ser valiente, los miedos… los miedos hay que comérselos”

La vida da miedo y no la muerte.

¿Dónde se sufre? Viviendo…

Y por eso, hay días que los tienes que mirar con cuatro ojos, con el “VALIENTE” en la frente, y el volumen bien alto, para que te puedan escuchar siempre que quieras…

La vida da miedo y no la muerte.

Siempre me cuenta que sus ojos ya no brillan como antes, ¿Por qué el tiempo borra el brillo de sus ojos? El tiempo le ha quitado demasiadas cosas, pensaba que el tiempo te las devolvía, pero no, las roba…

Buenas noches, como cada noche, y buenos días, los espero cada día.